Autor: J. M. Servín Editorial: Almadía
La ciudad pende de un hilo. Sobre ella se cierne la tormenta del caos, la descomposición social le carcome las entrañas. Sitiada, espera a que caiga la gota que derrame su negro contenido. Injusticia, violencia, pobreza, desigualdad, crimen. Esto es lo que sucede Al final del vacío, novela que mira de frente el apocalipsis urbano y narra el momento en que la sociedad rompe consigo misma, se descara y saca a la calle sus ganas de revuelta, sus odios reprimidos.
El centro de la urbe es tomado por los Dingos, grupo criminal que cada vez se extiende más en sus dominios. El protagonista —anónimo, duro, cínico— se despierta un día habitando un campo de guerra, una ciudad sitiada. Sus principales objetivos son dos: encontrar a Ingrid, su compañera, a quien no ha visto desde antes de que empezara todo; y sobrevivir, entre los saqueos, la anarquía y la brutalidad que domina las calles.
En esta expedición a los confines de la desesperanza, el protagonista es consciente de que la aspereza de la vida se remonta varias generaciones atrás, sabe que nuestros padres y abuelos sucumbieron a la violencia y al sinsentido, ¿por qué tendríamos que ser nosotros quienes rompan ese círculo de perdición? Quizá tendremos, en cambio, el privilegio de presenciar la caída de la sociedad.Páginas: 297 Año publicación: 2015
La ciudad pende de un hilo. Sobre ella se cierne la tormenta del caos, la descomposición social le carcome las entrañas. Sitiada, espera a que caiga la gota que derrame su negro contenido. Injusticia, violencia, pobreza, desigualdad, crimen. Esto es lo que sucede Al final del vacío, novela que mira de frente el apocalipsis urbano y narra el momento en que la sociedad rompe consigo misma, se descara y saca a la calle sus ganas de revuelta, sus odios reprimidos.
El centro de la urbe es tomado por los Dingos, grupo criminal que cada vez se extiende más en sus dominios. El protagonista —anónimo, duro, cínico— se despierta un día habitando un campo de guerra, una ciudad sitiada. Sus principales objetivos son dos: encontrar a Ingrid, su compañera, a quien no ha visto desde antes de que empezara todo; y sobrevivir, entre los saqueos, la anarquía y la brutalidad que domina las calles.
En esta expedición a los confines de la desesperanza, el protagonista es consciente de que la aspereza de la vida se remonta varias generaciones atrás, sabe que nuestros padres y abuelos sucumbieron a la violencia y al sinsentido, ¿por qué tendríamos que ser nosotros quienes rompan ese círculo de perdición? Quizá tendremos, en cambio, el privilegio de presenciar la caída de la sociedad.
Al final del vacío
$24.900
Autor: J. M. Servín
Editorial: Almadía
La ciudad pende de un hilo. Sobre ella se cierne la tormenta del caos, la descomposición social le carcome las entrañas. Sitiada, espera a que caiga la gota que derrame su negro contenido. Injusticia, violencia, pobreza, desigualdad, crimen. Esto es lo que sucede Al final del vacío, novela que mira de frente el apocalipsis urbano y narra el momento en que la sociedad rompe consigo misma, se descara y saca a la calle sus ganas de revuelta, sus odios reprimidos.
El centro de la urbe es tomado por los Dingos, grupo criminal que cada vez se extiende más en sus dominios. El protagonista —anónimo, duro, cínico— se despierta un día habitando un campo de guerra, una ciudad sitiada. Sus principales objetivos son dos: encontrar a Ingrid, su compañera, a quien no ha visto desde antes de que empezara todo; y sobrevivir, entre los saqueos, la anarquía y la brutalidad que domina las calles.
En esta expedición a los confines de la desesperanza, el protagonista es consciente de que la aspereza de la vida se remonta varias generaciones atrás, sabe que nuestros padres y abuelos sucumbieron a la violencia y al sinsentido, ¿por qué tendríamos que ser nosotros quienes rompan ese círculo de perdición? Quizá tendremos, en cambio, el privilegio de presenciar la caída de la sociedad.Páginas: 297
Año publicación: 2015
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Descripción
La ciudad pende de un hilo. Sobre ella se cierne la tormenta del caos, la descomposición social le carcome las entrañas. Sitiada, espera a que caiga la gota que derrame su negro contenido. Injusticia, violencia, pobreza, desigualdad, crimen. Esto es lo que sucede Al final del vacío, novela que mira de frente el apocalipsis urbano y narra el momento en que la sociedad rompe consigo misma, se descara y saca a la calle sus ganas de revuelta, sus odios reprimidos.
El centro de la urbe es tomado por los Dingos, grupo criminal que cada vez se extiende más en sus dominios. El protagonista —anónimo, duro, cínico— se despierta un día habitando un campo de guerra, una ciudad sitiada. Sus principales objetivos son dos: encontrar a Ingrid, su compañera, a quien no ha visto desde antes de que empezara todo; y sobrevivir, entre los saqueos, la anarquía y la brutalidad que domina las calles.
En esta expedición a los confines de la desesperanza, el protagonista es consciente de que la aspereza de la vida se remonta varias generaciones atrás, sabe que nuestros padres y abuelos sucumbieron a la violencia y al sinsentido, ¿por qué tendríamos que ser nosotros quienes rompan ese círculo de perdición? Quizá tendremos, en cambio, el privilegio de presenciar la caída de la sociedad.